
Las encuestas dan como vencedor por un amplio margen al candidato del Partido de los Trabajadores Luiz Inácio Lula da Silva. En el mundo del deporte, sin embargo, las principales personalidades (Neymar, Ronaldinho, Romário o Rivaldo, por ejemplo) han apoyado abiertamente a Jair Bolsonaro. Han habido también bastantes voces que se han posicionado desde el deporte a favor de Lula y en contra de lo que llaman “un peligro para la democracia”. Sin duda, los resultados de hoy serán clave para el futuro democrático de América Latina.
Este domingo Brasil vivirá una larga jornada de elecciones que no solo servirá para decidir quién ganará la presidencia del país, sino que también quiénes serán los y las representantes para la Asamblea Legislativa Federal, Senado, Gobierno de los Estados, entre otras autoridades.
Más de 156 millones de personas participarán del proceso que es de votación electrónica y obligatoria -aunque voluntaria para personas entre 16 y 17 años, y para mayores de 70-. Si bien desde hace meses que el ex presidente de Brasil, Lula da Silva (Partido de los Trabajadores) lidera las encuestas, no existe ninguna seguridad, pues el número de personas indecisas todavía es muy importante. Para ganar, da Silva requiere el 50% más 1 de los votos y parece no estar muy lejos. El sondeo Datafolha reveló esta semana que un 50% de la intención de voto es para él, seguido por el actual presidente de Brasil Jair Bolsonaro (Partido Liberal) con un 36%. Ciro Gomes (PDT) y Simone Tebet (MDB) continúan en tercer y cuarto lugar, con 6% y 5% respectivamente.
Esta semana en particular resultaba clave para las candidaturas, pues iba a tomar lugar el tradicional debate organizado por el canal O Globo. Lo dicho en ese debate podría inclinar la balanza para quienes todavía no habían decidido su voto. ¿El resultado? Una conversación llena de ataques. Mientras Lula acusaba a Bolsonaro de mentir, que era vergonzoso hacerlo y que si buscaba corrupción debía “mirarse al espejo”; el candidato conservador tildó al expresidente como “mentiroso, ex preso y traidor». Recordemos que el líder del Partido de los Trabajadores estuvo en la cárcel por más de 500 días por corrupción y lavado de dinero, condena que fue revocada en 2021.
Es en este contexto que deportistas del país han decidido hacer público su apoyo a alguno de los dos candidatos más grandes, da Silva y Bolsonaro, tomando una decisión que no siempre es sencilla, pues podría traer consecuencias para sus carreras.
Jair Bolsonaro
Candidato por el Partido Liberal, Bolsonaro es militar retirado y actual presidente de Brasil. Su nombre, dicen, es un tributo al ex futbolista brasileño Jair da Costa, cuyo último club fue el Santos. Antes de llegar a la presidencia en 2018, fue diputado por 27 años. También se ha catalogado como admirador del ex presidente de Estados Unidos Donald Trump, posicionado contra el aborto y los derechos de las personas LGBTIQ+ y es recordado por haber dicho que “el regimen militar tenía que haber terminado el trabajo matando a unos 30 mil” o por decirle a una diputada que era “demasiado fea para ser violada”.
Deportistas por Bolsonaro
Durante esta semana, Neymar ocupó las principales portadas de medios de comunicación a nivel mundial al hacer público su apoyo al candidato conservador Jair Bolsonaro. En un video de Tik Tok, el actual jugador del Paris Saint Germain bailó al ritmo del jingle de la campaña de Bolsonaro. Poco después de publicado el video, y después de muchas críticas en su contra, subió un comentario a su cuenta de Twitter:
Además de Neymar, han mostrado apoyo a Bolsonaro el actual delantero del Tottenham Lucas Moura, así como también Felipe Melo, centrocampista del Fluminense. En representación de futbolistas históricos de Brasil, apoyan al candidato grandes nombres como Pelé, Ronaldinho -quien fue detenido y encarcelado en Paraguay por falsificación de pasaportes- y Romário, ex delantero del Barcelona quien espera convertirse en esta elección en senador por Río de Janeiro.
«El presidente defiende a la familia, y eso es muy importante para mí. Es contrario al aborto y a la legalización de las drogas. Es espontáneo, quiere un Brasil que vaya para adelante», dijo Romário en una entrevista con la revista semanal brasileña Veja. «Defiendo a Bolsonaro, pero no soy un Bolsominion». Romário fue elegido diputado en 2010 a través del Partido Socialista. En 2017 se unió a Podemos, partido por el que compitió por la gobernación de Río un año después. Hoy, Romário es parte del Partido Liberal de aquel país, del que también es militante Bolsonaro.
La camiseta de Brasil
Una de las tónicas de la campaña comunicacional de Jair Bolsonaro ha sido el uso de la simbología del fútbol. Flamengo, Corinthians y Palmeiras fueron algunas de las camisetas que Bolsonaro usó tanto en su primera campaña como en actos de gobierno ya siendo presidente. Ha también abandonado el uso de colores de clubes pasando a la utilización de la camiseta de la selección -la camiseta amarilla y verde reconocida en todo el mundo- como parte de su iconografía. De hecho, el actual mandatario instó a sus votantes a sufragar vistiendo la camiseta –como lo hizo él a primera hora de la mañana– e incluso se rumoreó que la justicia podría prohibir asistir a los recintos de votación a las personas que la estuviesen ocupando, algo que fue finalmente descartado por el tribunal electoral de aquel país.

La asociación de aquellos colores con Bolsonaro y sus políticas ha sido tan fuerte que para parte de la población usar la camiseta se ha convertido en un elemento político. Detractores de Bolsonaro han propuesto regresar al blanco y celeste, los colores que usaba la selección brasileña hasta 1950 y que después del maracanazo fueron reemplazados por la actual amarilla y verde para eliminar la supuesta mala suerte que la anterior tenía. Lo que es cierto es que cerca de un 20% de brasileños y brasileñas dice que no usarían la camiseta de Brasil debido a las implicaciones políticas que hoy tiene.
Así, ha brotado también un movimiento que pretende recuperar los símbolos que el bolsonarismo ha hecho propios, entre ellos, la camiseta de la selección. “Se apropian de todo, pero nada es de ellos, todo es nuestro”, dijo el rapero Djonga en un show mientras vestía la camiseta. También lo hizo así el delantero del Tottenham Hotspurs Richarlison, quien lamentó que este movimiento político haya transformado una identidad que era anteriormente de todo el mundo.
Lula Da Silva
El favorito para ganar estas elecciones es sin duda el expresidente (2003-2010) y lider del Partido de los Trabajadores, Luiz Inácio Lula da Silva. Obrero metalúrgico de profesión y sindicalista, Lula fue diputado entre 1987 y 1991 y dejó la presidencia del país en 2011 con un 90% de aprobación.
En 2017, Lula es condenado por primera vez por la justicia brasileña por corrupción y lavado de dinero y es condenado a nueve años en prisión. En 2021, todas las condenas de lula son desestimadas permitiéndole así presentarse como candidato a la presidencia.
Deportistas por Lula
La mayoría de los principales futbolistas brasileños de renombre internacional en actividad -por ejemplo, Neymar- están a favor, al menos públicamente, de Jair Bolsonaro. Así, las oposiciones a la iconografía usada por el actual presidente (por ejemplo, la oposición al apropio de la camiseta denunciada por Richarlison) han sido algunas de las voces que han sido atribuidas como apoyos a Lula.
No obstante, también ha habido voces más directas desde el mundo del fútbol. Paulinho, jugador del Bayer Leverkusen, ha sido una de ellas. “Amor a la patria y un carajo, amor al pueblo. Si no es en nombre del pueblo, no es en nombre de la patria”, declaró en redes sociales, cerrando con un “Lula en primera vuelta, fuera Bozo”.
Paulinho también ha hecho eco en discusiones de las frases de otros ya retirados que también han apoyado públicamente al candidato del Partido de los Trabajadores. Uno de ellos es Juninho Pernambucano: “Me repulsa ver jugadores de derecha. Venimos de abajo, fuimos criados con la masa. ¿Cómo vamos a estar de su lado? ¿Cómo vas a apoyar a Bolsonaro, mi hermano?”. Juninho, histórico jugador del Olympique Lyon, ha declarado públicamente su apoyo a Lula da Silva en estas elecciones.
Quien también ha entregado su respaldo a da Silva es Walter Casagrande, ídolo del Corinthians y uno de los líderes de la Democracia Corinthiana, movimiento que en la década de los 80 se opuso a la dictadura militar a través de la aplicación de la democracia directa en todos y cada uno de los estamentos del club. Casagrande ha sido parte de los eventos de campaña de Lula, como también lo han sido el campeón del mundo en 1994 Raí, y el ex entrenador del Real Madrid Vanderlei Luxemburgo.
Fuera del fútbol, personalidades del voleibol (Ana Moser, Carol Solberg), Taekwondo (Diogo da Silva) y natación (Joana Maranhão) han declarado su abierto apoyo al candidato del Partido de los Trabajadores.