No da lo mismo

Por Daniel Albornoz Vásquez
Socio de la Asociación Hinchas Azules

El domingo muchos sentimos los resultados de las elecciones presidenciales como una derrota de cancha, la sentimos en la guata. Como hinchas, hemos podido observar a múltiples grupos, colectivos, piños, organizaciones condenar el horror que tiene preparado el candidato de la extrema derecha en su programa de gobierno. Hemos visto un llamado muy rápido a votar por el candidato de Apruebo Dignidad. Como miembro de la Asociación Hinchas Azules confirmo: en la interna, la discusión evidentemente se da.

Así, recordamos aquellas cosas por las que luchamos. Por ejemplo, los años duros del Plan Estadio Seguro, es decir, controles abusivos, toqueteo a menores; en fin, las humillaciones y malos tratos que se volvieron constantes en los estadios -en las galerías, más bien-, y los alrededores. Esa política pública nefasta nos volcó a convocar a marchas, a manifestar en la cancha y en la calle que los bombos y las banderas nunca mataron a nadie, a generar publicaciones, a realizar foros; todo para frenar la criminalización y la represión por el hecho de ser hincha e ir al estadio.

En la segunda vuelta se va a votar por un proyecto u otro para el país. El de extrema derecha propone no solo dejar la fiesta y las barras fuera, sino perseguirlas como asociaciones ilícitas. Se trata directamente de perseguirlas, pues no basta decretar la disolución de las barras bravas para que dejen de existir. Su candidato dice que “le puedes poner tobillera” para marcar a quien sea sancionado.

¿Y para mejorar el ambiente social que alimenta la violencia cotidiana que explota en los estadios? Nada la verdad.

¿Qué respuestas damos desde el mundo social de las hinchadas a las problemáticas que se generan en el contexto de las barras? Organizarnos. Pertenezco a una de muchas organizaciones que vienen colaborando hace años para, entre otras cosas, protegernos de los abusos policiales, ayudarnos a visibilizar la problemática, a resolver problemas particulares, acompañar a camaradas en dificultades. Estas organizaciones han creado proyectos educativos, deportivos, sociales, culturales, artísticos, políticos para hacerse cargo de su propia realidad. La respuesta no suena lejana al concepto de “barrismo social y comunitario” que propone el programa de Apruebo Dignidad.

Nuestro objetivo principal es la recuperación del club Universidad de Chile y para lograrlo hay que tener una alternativa viable a la catástrofe de la sociedad anónima. A la vez, quienes pertenecemos en alma a un club tenemos el derecho de poder participar de este, incidir en su proyecto, el que se entrelaza con nuestras vidas. Sabemos que es necesario cambiar el modelo de administración de los clubes profesionales y eso también lo propone el programa de Apruebo Dignidad.

No creo que haya que tener una fe ciega en los programas. Es una meta concreta de la Asociación Hinchas Azules: el concretar los cambios legislativos que permitan un club participativo. Ya hemos participado del proceso de redacción del proyecto de modificación a la ley 20.019 (SADP). Y esa participación efectiva activa se basa en proponer, no en esperar. Esa, espero, seguirá siendo la actitud de la AHA, independientemente del gobierno y su agenda. Y también, habrá que ver qué significa en concreto el “barrismo social y comunitario”. No olvidemos que viene a reemplazar al Plan Estadio Seguro. Dicho esto, convengamos, es claro que una candidatura allana el camino mientras que la otra lo dificulta.

Será una decisión colectiva si es que la AHA -y/u otras organizaciones de la hinchada azul- decide llamar explícitamente a votar por la opción número 1. En cuanto a mí, yo votaré por Gabriel Boric.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s