
Silvana, magallánica, ha transitado por distintos roles en los deportes: desde profesora de educación física a competidora de alto rendimiento. Hoy, no obstante, busca otro rol: el de llegar a la Convención Constitucional. A través de Evópoli, pero manteniendo su independencia, busca llegar a la Convención para dejar plasmados distintos derechos y cambios, como una regionalización efectiva, mejoras en salud y vivienda, y la inclusión del deporte en la carta magna.
Si hacemos el ejercicio de escribir Silvana Camelio Thomsen en algún buscador de internet, salen las mismas historias: que es corredora, que fue esquiadora, que ocupó uno de los primeros lugares en la Triatlón de Pucón y que obtuvo el primer puesto en el World Marathon Challenge, competencia en la que se corren siete maratones, en sietes días, en siete continentes. Sin embargo, durante estas semanas, esos titulares han ido cambiando, pues se convirtió en una de las cartas de Evópoli para representar a Magallanes en la próxima Convención Constitucional.
Silvana vive con su familia en Magallanes. Es profesora de Educación Física y desde que tiene uso de razón ha estado ligada al deporte. “Es la gran herencia que tengo de mis padres: ese amor por la naturaleza, el deporte y la actividad física”, cuenta.
Su candidatura por la región en que nació está siendo apoyada por Evópoli. Sin embargo, decidió mantenerse como independiente y no firmar por el partido: “No me considero política. Yo creo que voy a entrar, voy a hacer este trabajo, si es que llego a salir electa, y después voy a seguir con mi vida. Mi ideal no es seguir en política, aunque no puedo descartar que quizás, durante el camino, me terminé entusiasmado y firme”.
Al nunca estar ligada al trabajo político partidista, Silvana ha considerado clave prepararse para el eventual desafío de representar a su región en la convención. Ha estado haciendo cursos sobre Constitución y asistiendo a charlas sobre temas de los que no es particularmente cercana, como el aborto. “Si uno quiere meterse en esto, hay que estudiarlo todo y hacerlo responsablemente”, explica.
¿Qué significa el deporte para ti?
Nací en una familia de deportistas en Punta Arenas. Mi papá era un amante del deporte y nos lo inculcó desde muy pequeños. Para mí, el deporte es cómo lavarse los dientes, es algo intrínseco de nuestra vida, tanto mía como de mi familia. Es una manera de vivir.
¿Están incluidas las organizaciones sociales en tu concepción de deporte?
Para que este país tenga una cultura deportiva, o sea, que las personas se muevan porque sí, porque saben que les va a hacer bien, el deporte tiene que entrar en todos los ámbitos, no solo en el colegio. ¿Quién educa al padre o a la madre que nunca tuvo educación? Esas son las organizaciones sociales. El deporte tiene que ser transversal si es que queremos realmente mejorar la salud a través de él.
Sabemos que has transitado por varios deportes y en varios roles, ¿cómo evalúas el deporte en Chile hoy?
Recién estos últimos años se le está dando más importancia a la actividad física en todos los niveles, en todas las edades, debido al gran problema de salud que se está presentando en el país. Mi gran sueño es ver un país en movimiento, que la gente tenga esa necesidad de querer moverse. Creo que todavía estamos lejos, en términos de políticas deportivas, para que seamos un país en movimiento.
¿Crees que el deporte debería estar consagrado en la constitución como un derecho?
En un principio, pensé que este era un tema que dependía de políticas públicas, de programas de educación, hasta que un día, leyendo entre todo lo que he tenido que estudiar, vi que los españoles tienen el deporte dentro de su Constitución. La verdad, es un tema que tengo que estudiar bien para evaluar cómo se puede implementar. Si la gente hiciera un poco de actividad física, los problemas de salud bajarían, sobre todo en salud mental, porque la actividad física te libera. No creo que sea prioritario para muchos, pero con buenos argumentos, podría resultar.
¿Cómo te imaginas la Constitución?
La Constitución no puede ser un programa de gobierno, tiene que ser para nosotros y para las generaciones que vienen, por lo que tiene que ser un pensamiento muy transversal. Una de las virtudes que reconozco que tengo es que soy muy abierta de mente, puedo escuchar las opiniones de mucha gente y creo que va a tener que haber mucho de eso para llegar a buen puerto y que este proceso no sea un trabajo en vano.
¿Cuáles son los temas que más te interesa que queden plasmados en esta nueva constitución?
La regionalización es algo súper importante que hemos levantado los magallánicos durante mucho tiempo. Las mejoras sociales también van a ser un gran tema en la próxima Convención Constitucional porque, como están hoy, los derechos son muy vagos, entonces hay que mejorarlos para que la gente se sienta más digna, para que la gente sienta que mejora su calidad de vida. Hay varios derechos sociales que ya están en la Constitución, como el derecho a un medio ambiente limpio, por ejemplo, pero todo hay que mejorarlo. La salud, sabemos que hay que mejorarla de todas maneras; la educación, se menciona la libertad en educación, pero si dejamos eso, vamos a seguir igual, porque en este momento, la gente que tiene más dinero manda a sus hijos a colegios particulares y los que no, a municipales, y la diferencia es mucha. El derecho a la vivienda creo que hay que incluirlo, porque acá en Punta Arenas, gracias a Dios, las viviendas sociales son bastante buenas, pero no se ve lo mismo en otras partes del país.
¿Qué significa para ti la regionalización?
El próximo año hay elecciones de gobernadores y eso va a ser un gran paso, pero otras autoridades van a ser elegidas a nivel central y eso no me gusta mucho. Creo que en la nueva Constitución se le debe dar más atribuciones al gobernador, porque el gobernador debería manejar las políticas internas. Yo creo que ese va a ser un tema no solo de los magallánicos, sino también de la gente del extremo norte que creo que piensa parecido a nosotros. Es algo importante para que la gente piense que trabaja más por su región sin tener que preguntarle al gobierno central cada vez que levante una piedra.
Hay una nota de Radio Polar que dice esto de ti: “Silvana Camelio pretende entregar sus conocimientos, su fuerza y su talento a todos los magallánicos/as en este proceso histórico, con una visión estratégica del territorio, desde una perspectiva de género y con un gran componente social”. ¿Qué significan estos pilares?
Sobre la regionalización, el uso de nuestros recursos y poder aprovechar más lo que queda de los recursos aquí en Magallanes y que no se vayan hacia el norte, así considero la visión estratégica del territorio. Sobre los derechos sociales, es algo para todo el país. La gente se siente súper pasada a llevar. Hay que pelear porque los derechos sociales tengan su apellido en la Constitución y eso yo creo que va a ser importante. No poner derecho a la salud y nada más, tenemos claro que debe llevar un apellido. Sobre equidad de género, creo que esa es una lucha de todas nosotras. Poco a poco, las mujeres hemos ido ganando terreno y nos estamos atreviendo. Muchas amigas me dicen que soy valiente por meterme en esto, pero la verdad es que muchas veces hay mujeres que no es que no quieran, sino que no se atreven, entonces hay que servir de ejemplo. Así como en el deporte yo he sido ejemplo para muchas mujeres, esto va a servir para demostrar que una simple profesora de educación física que se dedicaba a correr y educar niños sanos para la vida, sí puede.
¿Cuál es tu evaluación de la Constitución actual?
Se votó por la primera Constitución en 1980 y en esa época yo, que era estudiante de Educación Física, voté que no. Ni siquiera me di la pega de leer la Constitución, pero la rechacé por cómo estaba hecha, por lo que involucraba y por las cosas que estaban pasando en el país. Mi familia siempre ha sido de centro derecha, pero una, a esa edad, toma sus propios caminos. Y para el último plebiscito me dije que, si a los 18 años no me gustaba esa constitución, ¿por qué me va a gustar ahora? Además, es súper poco amigable. Uno va en la tercera página y no puede seguir porque no se entiende nada. Para nosotros, para el ciudadano común, tiene que ser una Constitución amigable, que alguien la pueda leer sin enredarse y que no tenga palabras que realmente no las vas a encontrar ni en el diccionario.
El compromiso de ser candidata

¿Por qué dar el salto hacia una candidatura?
La verdad es que no es un salto, es casi un compromiso. En la vida me ha tocado vivir de todo y siempre he salido bien. Yo soy bastante católica y creo que uno recibe ciertos dones y que tiene que ser agradecida por todo lo que uno ha recibido. Creo que esta es mi gran entrega a la sociedad. Siempre he recibido mucho y es el momento; siempre me he sentido con esa deuda, a pesar de que he participado de algunos movimientos sociales relacionados a la iglesia.
Tú eres de Magallanes y vas como candidata por ese territorio, ¿consideras que la vinculación con el territorio es importante en una candidatura?
Siempre he pensado que no es correcto ir a candidatearse por un territorio que no sea el tuyo. Yo creo que acá en Magallanes somos tan magallánicos que, si viene alguien de fuera, le va a costar mucho salir electo. Los magallánicos tenemos muy buena memoria. La verdad es que me siento muy orgullosa de mi tierra y creo que un representante debiera ser de su tierra. Los políticos tienen otra mentalidad, pero como yo no soy política, lo hago más desde el corazón. Ellos juegan con el distrito y se desplazan de un lugar a otro, pero yo pienso que un candidato debiera ser de su tierra.
¿Por qué Evópoli?
¿Por qué no otro? Un amigo de mi familia que vive en Rancagua fue el que me llamó. Él es militante de Evópoli y fue el primero en llamarme. Evópoli es un partido de centro-derecha, quizás si hubiera sido un partido como la Democracia Cristiana, también hubiera aceptado. No un partido de extrema derecha o de extrema izquierda porque no me siento en absoluto identificada, pero Evópoli me mostró sus lineamientos y la verdad es que me gustaron y por eso les dije que sí.
¿Cómo fue el proceso de decisión?
Lo pensé mucho porque, como te decía, leer la Constitución más los cursos que estoy haciendo no es fácil para mí, que estoy en constante movimiento. Después del 25 de octubre me puse más nerviosa porque sabía que iba a recibir la gran llamada para saber qué había decidido, porque hasta el momento había sido solo pensarlo. Me habían contactado de Evópoli antes del plebiscito para ofrecerme el cupo y les dije que no quería firmar por el partido, que me mantendría como independiente. En eso han sido súper respetuosos, han sido bien abiertos y acepté porque era Evópoli. Creo que si hubiera sido otro partido de derecha, habría dicho que no.
¿Por qué crees que te llamaron?
Creo que soy bien consecuente, en la vida hay que hacer lo que uno dice que va a hacer. En la parte deportiva he servido de ejemplo para muchos, no solo por haber ganado una medalla, sino que porque tengo perseverancia, me propongo desafíos y soy súper disciplinada y creo que esas son varias cualidades importantes. Lo otro es que nunca había participado en política y creo que eso es interesante porque los políticos están muy desprestigiados. Además, soy mujer y estaban buscando mujeres.
¿Cómo te sientes con los acuerdos de Evópoli con la UDI y el Partido Republicano?
Me van a tener que educar. Evópoli hizo una propuesta de evolución constitucional y no sé qué opinará sobre ella el resto de los partidos del pacto. Ahí van a tener que negociar los políticos. Hay cosas de los otros partidos que a mí no me gustan realmente y me causaría tristeza tener que aceptarlo porque hay un pacto, pero eso tendrá que ser parte de todo lo que tengo que estudiar.
Revisemos algunos temas que pueden ser complejos en la Convención Constituyente. Me gustaría saber qué opinas sobre:
Parlamento, ¿bicameral o unicameral?: Por cómo somos los chilenos, creo que es mejor que sea bicameral, sino se van a arrancar por los rieles.
Tipo de estado, ¿central o federado?: Estado central. No estamos para ser un Estado Federado todavía.
Aborto: Estuve en una charla y ¿sabes qué? yo no soy pro aborto, todo lo contrario, pero una chica dijo algo que me hizo mucho sentido: ¿por qué el Estado va a ser dueño de mi cuerpo? Prefiero la educación para evitar los abortos; el aborto existe en todas partes. Hoy en día, yo soy de un no rotundo al aborto, pero creo que va a ser un tema que va a dar para conversar.
Tribunal constitucional: Súper necesario. Tiene que seguir existiendo el Tribunal Constitucional.
Período presidencial: Creo que es bueno un período de cuatro años, así como está, pero sería buena una reelección. A veces los presidentes se quedan con la mitad de sus cosas hechas y no pueden terminar bien sus proyectos.
Estado presidencialista o parlamentario: Me gustaría que fuera semipresidencialista. El Estado no puede ser presidencialista.
Carabineros: Se debe renovar totalmente la formación de Carabineros, pero deben seguir, si en un momento eran los más queridos.