El día 9 de septiembre, en Colombia se llamaron a numerosas manifestaciones en respuesta a la muerte de Javier Ordóñez, un hombre de 45 años que fue asesinado por la policía en un procedimiento sumamente irregular. Las protestas, que fueron convocadas en contra de la violencia policial, han terminado con más de 10 manifestantes muertos. Y, más allá de investigaciones internas, no ha habido una respuesta importante de parte de la institucionalidad del país. La histórica impunidad policial parece ser una tónica de, al menos, esta parte del continente.
La respuesta a dicha convocatoria fue transversal, muchos sectores sociales se sumaron exigiendo un cambio necesario para las clases populares. El colectivo Hinchadas Antifascistas de Colombia, agrupación de distintos estamentos antifascistas ligados a clubes de fútbol de aquel país, fue uno de ellos. Y, como también es tónica en otras latitudes, se utilizó la presencia antifascista y la sigla ACAB (All Cops Are Bastards, que se traduce como “toda la policía es bastarda”) rayada en muros para acusar injerencia enxtranjera y presencia agitadora, desviando así la atención del alzamiento popular.
Como réplica a todo esto, el comunicado que reproducimos a continuación contiene las palabras del colectivo Hinchadas Antifascistas de Colombia en respuesta tanto a las convocatorias como a la opinión institucional en su contra.
Nosotrxs, Hinchadas Antifascistas de Colombia, manifestamos que:
Frente a las acciones que se desarrollaron la noche del 9 de septiembre de 2020 en la ciudad de Bogotá como resultado de la indignación acumulada por la brutalidad policial y excesivo uso de violencia hacia Javier Ordóñez, hombre asesinado a manos de la policía nacional, se ha desatado una ola de indignación y un estallido social en el que la comunidad ha volcado su rabia hacia los Comandos de Acción Inmediata (CAI) ubicados en diferentes sectores de la ciudad, transmitiendo un contundente mensaje de cansancio y reproche colectivo ante esta institución que se ha constituido como un cuerpo de control y de opresión más que de servicio a la comunidad; un mensaje en el que no se tolerarán más atropellos sin justicia, ni silencio ante la forma como arrebatan las vidas bajo un discurso de procedimientos que no son justificados. Por ello, Hinchadas Antifascistas Colombia apoya esta expresión de revuelta del pueblo. No aguantamos más represión ni que el Estado se siga lavando las manos y protegiendo a los asesinos del pueblo, quienes tienen un largo prontuario de abusos y asesinatos como son los casos de Dilan Cruz o Nicolás Neira, de campesinos, indígenas, afrodescendientes, niños y niñas, mujeres, y muchos más que han sido víctimas del Estado, y que continúan en la impunidad.
Rechazamos las acusaciones que se han realizado desde el Ministerio de Defensa y figuras políticas de derecha, las cuales señalan a los movimientos sociales antifascistas, a quienes, bajo la etiqueta de “milicias urbanas de ACAB”, se nos acusa de terroristas y reclutadores, se nos estigmatiza y se genera sobre nuestras cabezas propaganda falsa con el ánimo de deslegitimar y desvirtuar lo que representa el movimiento antifascista. El antifascismo recoge una amplia gama de expresiones y diversidades en contra de toda clase de discriminación y abuso que se ejerza hacia la comunidad. Por su parte, la sigla ACAB es una consigna a nivel mundial en reproche al cuerpo policial y sus múltiples abusos de poder y bajo ella nos recogemos y nos sumaremos a las justas luchas del pueblo con la frente en alto. Nos mantenemos firmes en hacer de nuestros territorios espacios libres de fascismo y extendemos nuestra invitación a que desde las hinchadas de nuestro país continuemos sumando fuerzas en esta lucha. El miedo ya cambió de bando.
“Al fascismo no se le discute, se le destruye”
Revista Obdulio 