La crisis del boxeo amateur chileno

Ilustración realizada por Miguel Rodrigues

Hace algunas semanas, la Asociación Deportiva de Boxeo Santiago Centro -una de las más tradicionales del país- confirmó su asistencia al Campeonato Nacional categoría elite femenino que se está llevando a cabo entre el 28 y el 31 de agosto en instalaciones de la Federación Chilena de Boxeo (Fechibox). La confirmación vendría de la mano de la exigencia de la desvinculación de Juan Urzúa de sus funciones dentro de la Federación. Pero, ¿quién es Juan Urzúa? ¿Por qué la asociación de Santiago Centro amenazó con no competir en el campeonato si es que Urzúa seguía en sus funciones?

El boxeo amateur chileno pasa por momentos duros. Hace algunas semanas, la asociación de boxeo de Santiago Centro y que representa, entre otros, al Club México, decidió restarse del Match de Retadores -uno de los torneos más tradicionales del boxeo amateur nacional- a través de una carta firmada por Víctor Durán Reyes, su presidente subrogante. En ella se argumentó que la calidad de los jueces y árbitros que son designados comúnmente para oficiar en las veladas organizadas por la Federación no era la idónea para una actividad como esta debido a, entre otras cosas, su edad (la que por norma no debería nunca superar los 65 años) y también que los fallos suelen favorecer a la Asociación Centro Iquique, otra de las de mayor historia en Chile. Las responsabilidades, según Reyes, recaen en la figura de Juan Urzúa, designado por la Federación Chilena de Boxeo para determinar a los oficiales de ring y a quien se le acusa de designar a los árbitros “a dedo” entre sus amigos. 

Un comentario generalizado entre los asistentes a las veladas de boxeo organizadas por la Fechibox es que los fallos o las decisiones son muchas veces inexplicables. La respuesta de Urzúa ante esta acusación consistió en ataques xenófobos y homofóbicos a Víctor Durán -mensajes a los que tuvimos acceso-, ofreciendo además la posibilidad de arreglar este altercado a golpes. Entre dichos ataques, Urzúa menciona que los árbitros y jueces designados son los pocos con los que cuenta y que le gustaría tener un contingente más amplio. Esto, de todas maneras, no explica que los fallos sean sistemáticamente favorables a la Asociación Centro Iquique

Los problemas no quedaron ahí. Durante un match de exhibición llevado a cabo en Tomé el 22 de junio, el seleccionado nacional Patricio Rivas fue noqueado por un rival que lo superaba por cerca de 20 kilos. Según reportó en su momento la revista Boxeadores, hubo muchas irregularidades alrededor de este combate. La primera -y más obvia- fue la diferencia de peso entre ambos, lo que debió haber impedido que el combate se realizara. Rivas le comentó al presidente de la Federación, el iquiqueño Robinson Villarroel, su preocupación sobre la diferencia de pesos, pero éste hizo oídos sordos. Tampoco hubo algún representante del cuerpo técnico de la selección en ese gimnasio, pues había otros compromisos en distintas partes de Chile y Sudamérica. Por último, y pese a las indicaciones recomendadas por el equipo técnico del seleccionado antes del viaje, la pelea se llevó a cabo sin cabezales protectores. Como dictaminan las reglas del boxeo olímpico o amateur, los combatientes de categoría elite no deben utilizar cabezales protectores para combatir, pero de todas maneras se había acordado su uso por parte de los organizadores, pues la velada era de carácter amistosa. Según la misma fuente, fue Robinson Villarroel quien determinó que se peleara sin ellos. El resultado fue un nocaut escalofriante, como se muestra en el vídeo recogido por Boxeadores.

Las dudas que se generaron alrededor del torneo elite femenino que finaliza hoy no desaparecieron con la desvinculación de Urzúa. Durante los próximos meses comenzará el campeonato elite masculino y, por el momento, las asociaciones que rechazaron concurrir al match de retadores están evaluando su participación. No obstante, existen dudas tanto en los peleadores participantes como en entrenadores de los distintos equipos sobre cómo se llevarán las cosas en la federación y si las designaciones actuales en el elite femenino son solo casos aislados.

Foto por María Francisca Torres

El boxeo profesional tampoco se queda atrás. Comentado en su momento dentro de las esferas del boxeo fue el combate entre los iquiqueños Patricio Carrión y Cristián Olivares por el título profesional liviano de Chile que se llevó a cabo el 19 de octubre de 2018. En una decisión controvertida -y que muchos de los asistentes tildaron de robo-, Olivares se quedó con el cinturón. Lo notable -y cuestionable- fue que en la esquina del ganador celebró el presidente de la Fechibox, Robinson Villarroel, quien estuvo junto al Charly Boxing Team -equipo iquiqueño de promoción de boxeo- dándole instrucciones durante toda la pelea

El 7 de julio recién pasado, otro fallo controvertido tuvo lugar en la Casa del Deportista de Iquique cuando, y en contra de lo observado durante los 10 asaltos, el local Octavio Faúndez se llevó un empate en una pelea donde fue superado en todo momento por Mario Contreras, algo que incluso le reconoce el mismo Faúndez al “demoledor” Contreras durante el ring, como consta en las palabras de Contreras luego de la pelea. Este empate dejó vacante el título profesional chileno de la categoría Welter, el que volverá a ponerse en disputa cuando se lleve a cabo la revancha entre ambos.

La credibilidad del deporte es algo que se pone en riesgo con cada uno de estos actos, algo que mencionaban los asistentes a la Casa del Deportista que se fueron decepcionados luego del fallo antes mencionado. “Están echando a perder el boxeo chileno”, decía uno de los asistentes. Pero hay algo todavía más importante y que suele ser obviado: los peleadores. Porque este juego de poder que se lleva a cabo tras bambalinas se expresa con victorias injustas y personajes no idóneos para sus puestos (los “árbitros de tercera edad” que mencionaba Durán en su carta). Son los peleadores, finalmente, quienes se exponen a numerosas secuelas por llevar a cabo este deporte de la mejor manera. A Patricio Rivas, campeón nacional de su categoría, se lo expuso innecesariamente a lesiones que pueden haber tenido consecuencias de por vida y todo debido al mal manejo institucional. Y Rivas es solo un ejemplo de muchos más que ocurren todos los días, con peleadores que son noqueados en gimnasios que no cuentan con las mínimas garantías para practicar este tipo de deporte. Son ellos, los peleadores, quienes dejan parte importante de su vida por alcanzar la gloria y buscar mejor futuro. 

Los últimos meses, hemos sido testigos de cómo dos peleadores -Maxim Dadashev y Hugo Santillán- perdieron la vida tras lesiones cerebrales luego de finalizar sus combates. Mientras que, según la transmisión oficial de la pelea, tuvieron que contactar a la familia del peleador ruso antes de poder intervenirlo quirúrgicamente, la licencia del argentino estaba revocada hasta el 31 de julio por el castigo recibido en una pelea llevada a cabo en Alemania el 15 de junio. Detrás de ambos, y a distintos niveles, se hizo presente una maquinaria que vio como oportunidad de negocio el hecho de que ambos púgiles combatieran sin proteger, antes que todo, su salud. Esto es algo que nadie que sea parte del boxeo debe perder de vista, y a lo que se le pone mucho énfasis durante todas las capacitaciones organizadas por cuerpos oficiales e internacionales, tanto para árbitros, entrenadores y supervisores. El que hoy podamos ver cómo los jueces, árbitros y dirigentes cometan este tipo de irresponsabilidades finalmente dice a gritos que el sacrificio de muchachos que muchas veces vienen de los estratos más bajos (porque Julio Álamos es un caso particular, no la regla) no es tan importante. Y que esos mismos peleadores que se suben al ring a ser parte del ajedrez maquiavélico que hay detrás son desechables, porque si no son ellos, habrá otros. 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s